Aunque parezca increíble en Katmandú rige la ley del más fuerte!
No hay semáforos, ni policías de tráfico, no existe separación de carriles, no hay carril peatonal, es un auténtico caos!.
A pesar del lío, la gente ni se ponen nerviosa ni se enfada, cada uno a su bola.
Eso sí existe una norma y que todos la cumplen a la perfección es: una mano en el volante y la otra en el claxon.
Utilizan la bici, la moto predominando la marca Honda, los rickshaw que son triciclos de dos plazas, mini furgonetas, coches y el tempo que son scooters indios de tres ruedas.
Mirar el vídeo y a ver quién se atreve!