El pasado domingo en la localidad de Sant Feliu de Codines se celebró la segunda prueba de la Bike Trail Legends de una serie de 4 pruebas.
Uno de los requisitos de este campeonato es participar con una bicicleta clásica, para muchos de los participantes es volver a su infancia y recordar aquellos buenos momentos que nos dio este fantástico deporte iniciado en los años 70 de la mano de Josep Figueras y el Sr. Pi entre otros.
Las primeras bicicletas que participaron en esos años eran modelos de bicicletas de paseo adaptadas con piezas de motocicletas. En sus inicios este deporte se le llamó Trialsin más tarde cuando se internacionalización paso a llamarse Bike Trial.
Como es un deporte muy minoritario se dio la opción de participar con bicicletas más modernas y con pilotos jóvenes con gran experiencia, para todos estos se prepararon unas zonas más difíciles marcadas de color rojo para diferenciarse de las de color azul que eran más fáciles. También se adaptaron unas zonas para los más pequeños (de cuatro a siete años).
Yo había realizado Trialsin con una Montesa T10 con una adaptación a la T15 pero esa bicicleta fue hurtada en un proceso de olvido y medio descuido en casa de un amigo. Rápidamente empecé a mover contactos para intentar obtener una bicicleta clásica para realizar la Bike Trail Legends con la suerte que contacté con una persona que tenía una Montesa T15 y tenía ganas de venderla. Tan solo verla me enamoré de ella y aprovechando que era mi cumpleaños no me lo pensé ni un segundo y me permití este pequeño gran lujo.
Mis felicitaciones a la organización por la variedad de zonas y la diversidad de elementos naturales y remarcar el buen ambiente familiar que se vivió durante toda la jornada.
Tan sólo mencionar que subí al pódium en 1ª posición de mi categoría y me quedo con un fantástico recuerdo de mi infancia acompañado por mi familia donde mi hijo Pau pudo iniciarse a este fantástico deporte y con buena nota.