¡Hola a todos!

Aquí os presento una de las últimas creaciones de Salomon. Se trata del modelo Fellraiser, el cual está encaminado a rendir a alto nivel sobre superficies muy determinadas, tales como hierba, barro y nieve.

Salomon Fellraiser

Hoy, sin embargo, se trata de “hacerlas sufrir” en un terreno para el que no están concebidas principalmente pero que, quizás, nos sorprenda con unas prestaciones más que aceptables, lo que puede hacer de ella una zapatilla más polivalente de lo que a priori anuncia.

En cuanto a sus características, primeramente he de resaltar su drop de 6 mm, el cual ya he testeado largamente con las Salomon Sense Mantra y sobre el que puedo decir, sin miedo a equivocarme, que es un drop muy confortable para correr por montaña.

Por otra parte, la mayor parte del upper está compuesta de un material que repele bastante bien el agua y el barro, y que asimismo parece muy fácil de limpiar.

La suela es lo más llamativo de este modelo. Es de compuesto Contagrip, habitual de la marca, y dispone de numerosos tacos sobredimensionados en forma de chevrón, que son muy pero que muy blandos. Esta característica me hace pensar que la duración de los tacos puede ser muy escasa si no utilizamos la zapatilla en el terreno para el que fue concebida.

Suela de compuesto Contagrip (foto 2)

La flexibilidad de la zapatilla es enorme en todas las direcciones. La ausencia de placa protectora en la media suela o especiales refuerzos en el upper facilita que se moldee a nuestro antojo. Todo ello unido a que no es una zapatilla especialmente estrecha, la hace apta para casi todos los públicos.

Lengueta de grandes dimensiones (foto 3)

El sistema de atado es el característico a la vez que acertado de Salomon y lo que llama la atención es que cuenta con una lengüeta de grandes dimensiones, a la vez que muy acolchada, en la que podemos alojar, sin problemas, el cordón sobrante y “casi hasta las llaves de casa”.

En esta ocasión, se ha prescindido del Endofit de las Sense, intuyo que para facilitar al máximo la evacuación de agua. En cualquier caso, el ajuste de la zapatilla es muy bueno y no lo echaremos en falta.

Plantilla Otholite (foto 4)

Por otra parte, aquí Salomon ha optado por incorporar una plantilla de calidad. En concreto, una Otholite que, asimismo, incorporan otros modelos y que está microperforada en su parte anterior.

Otro aspecto que me parece interesante destacar es que el upper en el talón es bastante rígido, con la finalidad de sujetarlo al máximo pero su altura es escasa desde la suela, aunque es más que suficiente. Quizás a los que les guste sentir el tobillo algo protegido, no les agradará este detalle.

Upper rígido en el talón (foto 5)

Finalmente, comentar que el tejido de rejilla parece bastante transpirable y óptimo para drenar el agua.

Hoy no probaremos esto, ya que el día es soleado y caluroso, y el terreno por el que se desarrollará la prueba serán algunas de las trialeras más populares de Collserola. En fin, ¡vamos allá!

Las primeras sensaciones subiendo son que la zapatilla es muy blanda y flexible y que los tacos contribuyen a la amortiguación. El ajuste es muy bueno y me resultan muy cómodas.

Los tacos ofrecen un grip muy bueno, aunque en este terreno un compuesto más duro y menos taco también cumpliría este aspecto. Quizás, incluso mejor, ya que la flexibilidad del taco me hace sentir que pierdo energía de propulsión.

Por lo demás, voy muy bien, aunque también echo en falta un poco más de protección en la zona de los metatarsos.

La suela es muy flexible y, a pesar de la longitud de los tacos, el pie siente en  demasía, para mi gusto, las irregularidades del terreno. Habrá a quienes les agrade esta sensación; de hecho a mí me gusta, pero de un tiempo a esta parte tengo esta zona un tanto delicada y con este modelo voy poco protegido en zonas de piedras. Entiendo que Salomon prescindiera de la placa Profeel de las Mantra ya que, en teoría, la Fellraiser, como he comentado anteriormente, no va destinada a terrenos agresivos.

Su confort me está gustando y su peso de 290 gramos en talla 9 USA está bastante ajustado y dentro de lo que se espera hoy en día de una zapatilla competitiva.

Bueno, vamos a ver qué tal bajando…

Bien, parece que cojo confianza medianamente rápido, aunque la flexibilidad de sus tacos no me acaba de convencer por aquí. En determinados apoyos parece que flanea un poco la suela. En fin, que prefiero algo más rígido en estas condiciones. Por otra parte, la falta de protección en los metatarsos hace que pierda un poco de confianza.

De todos modos, no todo es negativo ni mucho menos. El ajuste de la zapatilla es impresionante y su confort también. El hecho de contar con una lengüeta tan almohadillada contribuye también a ello. Por otra parte, también su ligereza es de agradecer cuando se está descendiendo a altas velocidades.

Bueno, vamos a quitárnoslas de los pies y a ver qué nos encontramos.

Como intuía, es un buen modelo pero no tan polivalente como uno espera.

Seguro que son muy solventes en un terreno más propicio para explotar sus virtudes y para comprobarlo realizaré otro test más adelante.

La prueba de hoy ha servido para mostrar más sus carencias que sus puntos fuertes y, como me temía, aunque a la zapatilla se la ve intacta, sí que se empiezan a apreciar signos de desgaste prematuro en los tacos sometidos a mayor estrés, lo que me parece lógico y normal.

En fin, mis conclusiones son que no es un modelo especialmente polivalente y que en terreno técnico y seco, aparte de falta de protección en los metatarsos, la suela se consumirá prematuramente. Lo ideal para este terreno sería que Salomon sacara al mercado una evolución de este modelo. Una especie de Speedraiser con tacos algo menos dimensionados, de compuesto más duro, y que la media suela contara con la protección Profeel de las Mantra.

¡Aquí queda dicho!

Álvaro Rodríguez

http://fxtrail.wordpress.com/