Parece ser que los años no pasan para Mònica Aguilera, a sus 43 años afronta sus 20 años participando en raids, y lo celebrará participando en la Expedición Guaraní Paraguay junto a sus compañeros vascos Aitor Otamendi, Imanol Garaizabal y al catalán, David Tarrés formando el equipo Euskat-Raidaventura.Org. La Expedición Guaraní se disputará del 4 al 12 de marzo y en total serán 600 kilómetros que comprenden las diferentes disciplinas deportivas: bicicleta de montaña, trekking, kayak, cuerdas y orientación siendo esta última, la disciplina principal de la carrera, ya que en todas las secciones los equipos tendrán que avanzar con la única ayuda de un mapa y una brújula
¿Cómo y porqué decidiste participar en el Raid Expedición Guaraní?
El año pasado participé con el equipo Euskat en un raid internacional en el País Vasco, la experiencia fue muy positiva, el equipo funcionó muy bien y fuimos a gusto los cuatro integrantes del equipo. Ganamos el raid, y de ahí la inscripción a Paraguay, al raid Expedición Guaraní, así que aprovecharemos el premio y vamos a estar en la línea de salida de esta prueba de la copa del mundo de raids.
¿Cómo afrontas tus 20 años en los raid?
Con ilusión, son muchos años, muchas vivencias, y poder seguir haciendo lo que tanto me gusta no deja de ser un premio.
¿Cómo consigues mantenerte en forma durante tantos años en la élite?
Mònica Aguilera: La verdad es que cada vez compito menos en los raids, pues físicamente cada vez me cuesta más, pero por el contrario me mantienen viva, con ilusión, así que hacer un raid al año, de este tipo de expedición es muy gratificante. También hay que decir que en la larga distancia, a parte del entreno, la experiencia, la motivación y el sufrimiento son muy importantes, y yo de estos tres últimos aspectos tengo bastantes puntos.
¿Has hecho un pacto con el demonio?
Jaja, pues podría ser, pero no, simplemente sigo haciendo lo que me gusta, y con ganas de disfrutar. Cuando te gusta algo, no te retiras, sigues en ello tanto como puedas, en el nivel que sea y hasta donde llegas en cada ocasión.
¿Cómo has preparado las distintas disciplinas físicamente?
Pues básicamente ahora con mucha bici. Las rodillas ya no están para darle mucha caña, así que los entrenos largos los hago básicamente en bicicleta, ya sea carretera, montaña o gravel.
En esta ocasión también he intentado sacar horas de remo, en Paraguay tenemos 150 kilómetros de kayak, así que había que habituar el cuerpo a estar horas remando.
¿En qué deporte te sientes más a gusto y en cuál tienes alguna dificultad? ¿Porqué?
Mònica Aguilera: Lo que mejor llevo es la bicicleta. Aunque en este tipo de carreras, cuando estás haciendo alguna disciplina ya tienes ganas de cambiar y que llegue la siguiente. Siempre he sido más o menos polivalente en todo, pero igual lo que peor llevo son las aguas bravas, pero en este raid no vamos a tener ríos complicados.
¿Qué aspectos son los más duros y difíciles de gestionar durante tantos días de carrera?
Al principio poder mantener un buen ritmo de carrera para no perder la cabeza. Ya con la carrera en marcha y cada equipo en su lugar, el mantener el ritmo es clave, y a veces cuesta y lo único que te apetece es alargar las transiciones y las paradas.
Cuando ya llevas unos días, las heridas, las ampollas que te puedan haber salido condicionan más que el propio físico.
Aunque el sueño sea quizás uno de los aspectos más difíciles de gestionar. Hay que mantenerse activo en todo momento y no es nada fácil cuando empiezan a aparecer los bostezos.
¿Cómo se amañan las horas de sueño?
Mònica Aguilera: Uf, pues no es fácil. La primera noche no solemos dormir, a partir de la segunda hay que empezar a hacer paradas, la segunda como mínimo hay que dormir entre 30 o 40 minutos. Pero es difícil planificar, pues según la disciplina que estés en cada momento, las condiciones del tiempo, y las condiciones de los cuatro del equipo hacen que tengas que ir improvisando un poco según va la carrera.
¿Has podido entrenar con tus compañeros de equipo?
Algo hemos entrenado, yo básicamente con David, y Aitor con Imanol, aunque como ya estuvimos en el Basque Expedition el año pasado ya nos conocemos.
¿Cuál es la clave para finalizar este tipo de pruebas tan exigentes?
Ilusión, motivación, trabajo en equipo y no venirse abajo cuando surgen las adversidades, que las hay, y muchas, a lo largo de tantos días.