MONGOLIA TRAIL RUN 2024 se ha convertido en una experiencia de ultradistancia que jamás podremos olvidar.
Una carrera de casi 180 kilómetros por el intrépido y desconocido país de Mongolia, en Asia Oriental.
Mongolia es el decimonoveno país más grande del mundo (teniendo una superficie tres veces mayor que España).
Un país muy tranquilo que mantiene buenas relaciones con la mayoría de países de su alrededor y que es conocido como “la tierra del eterno cielo azul” porque tiene más de 250 días soleados al año.
Mongolia Trail Run es un evento deportivo de trail running donde se combina el correr, la aventura y el poder conocer cómo viven los habitantes del pueblo mongol.
Las condiciones nunca son perfectas pero, cuando eres capaz de analizarlas y aceptarlas, todo es atreverse y empezar.
No sabíamos si estaríamos preparadas para una carrera por etapas con una distancia tan larga, pero queríamos intentarlo.
Durante los meses previos a la carrera, el staff contestó por correo electrónico o teléfono todas nuestras dudas y nos ayudaron a gestionar los vuelos y demás detalles de preparación del viaje.
El visado solo es necesario para algunas nacionalidades como la andorrana, pero no para la española.
MONGOLIA TRAIL RUN 2024
Mongolia Trail Run es una carrera por etapas que te permite correr por el pequeño desierto del Gobi, las estepas mongolas al lado de caballos salvajes y cruzar ríos de agua cristalina.
Cada una de las etapas es distinta por su paisaje y su distancia.
De las dunas del desierto pasas a correr por altas montañas donde te encuentras ovoos (santuarios chamánicos fabricados con ramas), atraviesas bosques de altos árboles y llanuras inmensas.
El compromiso se contagia y nos queríamos comprometer a estar en la línea de salida. La ultradistancia exige compromiso, perseverancia y planificación.
Así que preparamos durante todo el año la carrera participando en distintas maratones de asfalto y algunas de trail.
El día 1 de agosto viajábamos hacia Ulan Bator, capital de Mongolia, donde reside la mitad de la población total.
La organización ya esperaba a los 32 corredores de distintos países (11 éramos españoles y 1 andorrana) y el resto de distintas procedencias (Inglaterra, Australia, Vietnam, Eslovenia, entre otras) que participaríamos en la carrera.
La verdad es que nos juntamos un gran grupo humano que deseaba ser finisher y disfrutar la experiencia al máximo.
Daba igual de dónde veníamos y qué experiencias previas teníamos; acabó uniéndonos las ganas de superar cada etapa, animándonos y ayudándonos cuando era necesario.
MONGOLIA TRAIL RUN – DOS MODALIDADES DE DISTINTA DISTANCIA
La carrera estaba dividida en dos modalidades de distinta distancia. La más larga, denominada Khan de 174 kilómetros, y la más corta, la Nomad de 90 kilómetros.
Nosotras decidimos hacer la larga.
En la sesión de presentación del evento, en un hotel de la ciudad, nos dieron la bienvenida oficialmente, se realizó la comprobación del material obligatorio que cada corredor debía llevar y nos visitó un médico que nos acompañaría durante todas las etapas por si alguno de los corredores o del staff lo necesitaba si aparecía algún problema de salud.
Posteriormente, nos explicaron con detalle todas las etapas (anteriormente nos habían enviado los tracks de la carrera para poderlos estudiar y descargar) y cómo iban a estar marcadas las etapas (con banderines rojos que nos ayudarían a no perdernos).
Aunque la carrera exigía GPS (en el móvil o en el reloj), el marcaje fue excelente en cada etapa y esto hizo que fuese casi imposible perderse.
En la primera cena pudimos presentarnos y conocer al resto de corredores con los que íbamos a compartir aquellos días.
A la mañana siguiente, el equipo y los participantes nos dividimos en diferentes furgonetas 4×4 y nos dirigimos en caravana hasta el primer campamento donde al día siguiente empezaría la primera etapa.
Una caravana compuesta por nuestras furgonetas, una ambulancia 4×4, una furgoneta cocina y varios vehículos más que transportaban nuestras maletas y el material necesario para el staff.
La salida sería en las puertas del pequeño desierto del Gobi, en la base de las dunas de arena de Elsen Tasarkhai.
PRIMERA ETAPA MONGOLIA TRAIL RUN
La primera etapa de 20 kilómetros transcurrió entre dunas de arena y una subida a una montaña rocosa.
Las polainas se hicieron imprescindibles para avanzar y no hundirse.
Pudimos correr al lado de camellos que nos miraban con mucho reposo y placidez.
Una etapa dura por el calor, pero espectacular por su paisaje.
Tras la llegada de todos los corredores, pudimos disfrutar de un almuerzo bufet delicioso para reponer fuerzas (este bufet lo encontraríamos en todas las llegadas).
Posteriormente, realizamos un transfer hasta el nuevo campamento disfrutando del paisaje y la compañía del resto de participantes.
Después de las etapas, quien lo deseaba tenía la posibilidad de visitar templos budistas y museos locales siempre acompañados de un guía local que nos ayudaba a conocer la historia de este acogedor país.
Hasta nos ofrecieron la oportunidad de participar en el principal festival nacional llamado Naadam (fiesta que es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad)-
Tiene lugar durante tres días en verano y donde los participantes mongoles cantan, hacen tiro al arco, participan en carreras de caballos campo a través y luchan.
Al finalizar las etapas, dormíamos en gers (viviendas tradicionales de los nómadas mongoles, también denominadas yurtas).
El ger mongol es una estructura de madera circular compuesta de postes y cubierta con una lona pintada y ornamentada con motivos mongoles tradicionales.
Es una construcción que resiste muy bien el viento y la lluvia. En medio de ella hay una pequeña hoguera, que encienden por la noche, para no pasar frío por la bajada de temperatura que se produce.
Los artesanos que fabrican los gers son muy respetados en las comunidades mongolas.
Al ser un pueblo nómada, en las diferentes etapas, habitualmente encuentras estas construcciones ya que la gente local vive en ellas formando pequeños poblados.
La gente al verte te saluda y te anima y los niños corren a tu lado chocándote la mano y animándote con mucha ilusión.
SEGUNDA ETAPA
La segunda etapa empezaba en el enorme lago Ugii, un lugar precioso que nos permitió disfrutar de un maravilloso amanecer.
Etapa larga, completamente llana, de 33 kilómetros de distancia.
Durante toda la etapa estuvimos acompañados de muchos caballos salvajes y de rebaños de ovejas o cabras.
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TERCERA ETAPA
La tercera etapa fue de 32 kilómetros y se convertía en la primera etapa montañosa, teniendo que subir a tres montañas con sus respectivos descensos.
Nos tocó pasar por ríos, ascender hasta las cimas y cruzar zonas boscosas acompañados por yaks, halcones y acabando el día con una gran sorpresa ya que en el campamento había piscinas de aguas termales de las que podíamos disfrutar.
En el cuarto día nos esperaban 37 kilómetros de distancia que transcurrían por valles, nuevos ríos que cruzar y montañas, corriendo muy cerca de muchas familias nómadas y sus rebaños de vacas.
QUINTA ETAPA
La quinta etapa correspondía a la etapa reina.
Nos esperaba una maratón de continúas subidas y empinadas bajadas empezando a correr con mucho frío y viento.
El inicio no fue fácil pero, tras avanzar unos kilómetros, el tiempo mejoró, se levantó la niebla y pudimos disfrutar de nuevo de maravillosos paisajes.
Los 42 kilómetros de distancia nos obligaron a subir 6 intensas y empinadas subidas y bajadas acumulando casi 1.500 metros de desnivel.
Al final de la etapa, nos aguardaba la ciudad de Karakorum (antigua capital del Imperio Mongol) y su monasterio que podíamos divisar al fondo durante los últimos kilómetros.
ÚLTIMA ETAPA
La última etapa, solo de 10 kilómetros, la compartíamos con nuestros compañeros de la distancia Nomad.
La llegada estaba dentro del emblemático monasterio budista del siglo XVI Erdene Zuu y allí, Joan, el director de la carrera y todo el staff nos esperaban para cruzar la meta y ponernos las medallas de finishers.
Un momento lleno de emoción, abrazos, algunas lágrimas y fotos para el recuerdo.
MONGOLIA TRAIL RUN 2024 quedará en nuestra memoria para siempre como una experiencia única e inolvidable.
Totalmente recomendable para los amantes del trail running, la aventura y a quien le apasione conocer nuevos países. Una carrera apta para todo tipo de corredores con ganas de disfrutar del trail y de paisajes increíbles.
Destacar de nuevo la excelente organización realizada por el grupo de profesionales (tanto españoles como locales) de la Mongolia Trail Run, que nos acogieron y cuidado durante todos los días y consiguieron que para todos los participantes se haya convertido en una experiencia muy difícil de olvidar.
Iolanda López y Patricia Rodríguez
Fotografías de Mongolia Trail Run