Del 23 de febrero al 2 de marzo se está celebrando en los Dolomitas italianos el Campeonato del Mundo de esquí de montaña. Una cita que se celebra cada dos años y que Laura Orgué había preparado a conciencia. Sin embargo, una gripe intestinal severa ha obligado a Laura Orgué a cambiar de planes y renunciar al Mundial y también a la Copa del Mundo. En definitiva, a dar por concluida la temporada de esquí de montaña para comenzar a pensar ya en trabajar en plenitud de condiciones en la de trail running.
“El pasado domingo empecé a encontrarme bastante mal. Detecté que era un problema de estómago. Tenía el deseo de que fuera una cosa pasajera, pero resultó ser una gripe intestinal en toda regla que me duró hasta este sábado. Han sido unos días duros y, finalmente he tenido que tomar una decisión. Me he quedado muy débil, con los depósitos vacíos y muscularmente muy vulnerable. Con el entrenador, médico y técnicos de la FEDME, hemos decidido que no tiene ningún sentido que tome parte en la Vertical del Mundial”, explica Laura Orgué que buscaba revalidar la medalla de oro que ya conquistó en la pasada edición. “En este punto, puedo decir que mi temporada de esquí de montaña se da por finalizada. Además, el médico que me operó del peroné el año pasado, cree conveniente que me saque los tornillos que me puso para ayudar a soldar y para poder empezar bien la temporada de trail running, así que fijamos la fecha para el 8 de marzo. Tengo un regusto muy amargo de cómo ha ido esta temporada, pero el deporte es así y cuando se te gira la suerte, puede ser cruel. También tengo que decir que he tenido la suerte que durante más de diez años de competición no había tenido ninguna lesión ni ninguna traba, y ahora, toca gestionar lo que viene”, ha añadido Laura.
La próxima semana Laura Orgué pasará por el quirófano y comenzará la recuperación para iniciar en plenas condiciones la temporada de trail running, donde es uno de los máximos referentes a nivel internacional.